Eran ya las doce del día. Nuestra aventura debía de haber comenzado hacía horas. Quedaban muchos lugares por conocer. Sin embargo, platicábamos animadamente frente a un rico café. A pesar del buen rato que disfrutábamos, me sentía mal por la falta de acción. Había que hacer algo pero estábamos tan a gusto que no daban ganas de mover un dedo.
Continuar leyendo “La falta de acción juega un gran papel”Un emprendedor con imaginación
A un emprendedor con imaginación se le ocurrió algo nuevo: vender monedas. ¿Es buena idea ese tipo de negocio? Nuestro pequeño héroe no lo sabía. Pero valía la pena experimentar. Y lo hizo. Tomó las monedas peruanas que su padre le había traído de un viaje y se decidió a iniciar aquella arriesgada empresa. Le daba miedo que fracasara el negocio. Sin embargo se dio cuenta de que no intentarlo era, en sí, un fracaso.