Finanzas personales libres de grietas

La verdad no lo recuerdo. Sin embargo, hay testimonios de que en mis primeros años de vida fui un poco diferente a otros bebés. No les hice las noches imposibles a mis papás. Aparentemente las horas en que despertaba llorando eran bastante accesibles para los adultos. Me han contado, incluso, que cuando ya era capaz de caminar por mi cuenta, llevaba a mi mamá de la mano para que me acostara a las 7 de la noche. Desde esa hora dormía, sin parar, hasta la siguiente mañana. Mis condiciones de sueño estos días no son tan óptimas como en aquellos años mozos. Sin embargo, las finanzas personales libres de grietas me han ayudado a gozar de un sueño pesado.

Grietas en la pared
Las grietas no anuncian nada bueno en el futuro.

¿De qué grietas hablo? De las deudas. Si bien actualmente no duermo como bebé, lo hago decentemente porque estoy completamente libre de deudas. Este artículo es parte de la exitosa serie Finanzas personales según Alejandro. Explico con detalle el segundo paso de cinco necesarios para tener unas finanzas sanas y limpias. El de hoy es un proceso sumamente importante. Una vida libre de deudas ofrece tranquilidad y libertad de movimiento. Mejor aún, una persona capaz de dormir 8 horas seguidas sin preocupaciones se desempeña mejor en todos los aspectos de la vida. Mi propuesta es la siguiente: a librarnos de deudas para dormir como bebés.

La importancia de las finanzas personales libres de grietas

Muchas cosas vienen a mi cabeza cuando pienso en deudas. En su ausencia hay tranquilidad y paz interna. Las cosas son diferentes en el caso contrario. Existe esa pequeña voz que se esmera en recordarnos, principalmente de noche, que hay algo que falta por allí. Mi preferencia personal es la primera sensación. Para que se cumpla, es necesario ejecutar el primer paso de la serie y vivir por debajo de nuestros recursos.

Mi historial de deudas se puede relatar sin ningún problema en un párrafo: a los 25 años compré un auto nuevo. Acababa de empezar un trabajo y mis papás me ayudaron a pagarlo. Lo pagué 5 meses después. A los 28 años compré un departamento a crédito, por 15 años; en dos años quedó pagado. (En esta entrada lo relato con más detalle). A los 29 años un amigo me prestó una cantidad baja de dinero, misma que pagué en un mes. A los 31 años compré otro auto por medio de un crédito bancario a cuatro años. ¿Por qué? No me lo explico todavía, pero así fue.

Irrelevantes

Mi opinión es que la mayor parte de las deudas que adquirimos son innecesarias. En mi ejemplo anterior, tres de las cuatro deudas fueron completamente innecesarias para unas finanzas personales libres de grietas:

  • El auto que compré con la ayuda de mis papás no era indispensable. En ese momento tenía un vehículo viejo, un escarabajo modelo 83 que me llevaba y me traía a todas partes sin problemas. Si hubiera esperado los cinco meses que tardé en pagarlo y lo hubiera pagado con mis ahorros, no me hubiera perdido de nada.
  • El préstamo personal fue después de mi boda. Con los gastos me quedé sin dinero para sobrevivir hasta el final del mes. Lo pagué, con interés voluntario, en cuanto recibí mi siguiente cheque. La solución: gastar menos en la boda.
  • Ni hablar de la compra del otro auto. Acababa de mudarme a una nueva ciudad, y contaba con poco capital. Pensé que no me alcanzaba el dinero. Obtuve un crédito bancario por cuatro años con una tasa de interés supuestamente baja. Aún así, pagué 30% por arriba del valor de contado, mismo porcentaje que perdió al cruzar la puerta de la agencia. Para colmo, no cumplía aún su primer aniversario cuando tuvo su primer accidente. La solución: comprar un coche usado barato y ahorrar para comprar posteriormente el auto de mis sueños.

La relevante

Tres de cuatro eran innecesarias. Esto nos deja con el departamento. Vamos a analizarlo:

En ese momento necesitaba un techo y no podía darme el lujo de vivir en la calle unos cuantos años. Se justificaba comprar dicha propiedad, a crédito. Pero hice mi tarea y busqué un crédito que me favoreciera: sin penalización por pagos anticipados. Otro aspecto importante era atacar desde el primer pago el capital y no solo los intereses. Obviamente no era esa la primera opción que me ofreció el banco, pero sí tenían disponible algo parecido.

Entonces me dediqué a pagar lo más posible por adelantado. Cualquier bono, horas extra, ahorros. Todo pago extra atacaba al capital. Recuerdo aquel aguinaldo en el que la deuda quedó herida de muerte. Poco después, perdí mi trabajo. Recibí una indemnización que me dio la posibilidad de vivir unos meses de manera frugal al mismo tiempo que liquidaba la deuda. Aún sin trabajo, tuve el privilegio de dejar mis finanzas personales libres de grietas.

Diferentes tipos de deudas

No todas las deudas son creadas iguales. Como ya expliqué arriba, hay  relevantes e irrelevantes. Si hay duda, son irrelevantes. Si algo nos está picando el orgullo o el ego para comprar a plazos, se trata de una deuda innecesaria que solo va a dañar nuestra situación financiera. De cualquier forma, mi recomendación tajante para unas finanzas personales libres de grietas es:

‘Libre de deudas’

A continuación explico diferentes tipos de deudas que se me ocurren. Doy mi humilde y personal opinión de qué tan necesarias las considero.

La tarjeta de crédito

cartera con tarjetas
Peligro: alto contenido de intereses

Dadas las tasas de interés que cobran los bancos por el saldo de las tarjetas de crédito, se me hace una locura pasar al mes siguiente debiendo un peso. Se deben pagar al 100% cada mes. ¿Cómo? Mediante un pago automático y completo del monto total. Una tarjeta sin pagar va en contra de la filosofía de las finanzas personales libres de grietas. Punto.

Las tarjetas de crédito, manejadas de manera responsable, tienen ventajas:  Algunas tienen atractivos programas de viajero frecuente o de puntos que al acumularlos dan buenos resultados. También es posible usar el estado de cuenta de la tarjeta para llevar la contabilidad del hogar.

De cualquier manera, ante cualquier duda, o con conocimiento de la debilidad humana propia, lo mejor es prescindir de ella. Se me olvidaba. ¿12 meses sin intereses? Jamás. Hay que vivir por debajo de nuestros ingresos.

El auto

Ya Lo expliqué arriba. Simplemente no vale la pena. Con el equivalente a unos cuantos pagos mensuales de un auto nuevo, podemos comprar uno usado. Con este cacharro en mano, podemos ahorrar para comprar de contado el tan deseado vehículo, si no hemos cambiado de parecer.

Préstamos de familiares y amigos

A menos que nuestra situación sea desesperada y que nuestra supervivencia dependa de eso (me refiero a falta de techo y alimentación), se deben evitar. No entro en detalles ya que cada familia es diferente y cada caso es diferente.

La casa, departamento, nido de amor, etc.

Si después de un análisis de compra vs. renta la conclusión es que se debe comprar una casa, adquirir una deuda debe ser únicamente para el lugar en el que vamos a vivir. Esto no incluye lugares para recreación o vacaciones. Si nos vamos a mudar a un lugar nuevo, una buena decisión es rentar al principio.

Como ya expliqué, es de particular importancia investigar cuál es el crédito que más nos favorece (ej: el que nos permite pagar capital desde el primer mes, sin penalizaciones por pagos adelantados). Una vez endeudados, la principal meta en la vida es pagar lo más pronto posible. Los doctores recomiendan dormir al menos ocho horas diarias. Esto se hace con finanzas libres de grietas.

Hay gente con grandes conocimientos financieros (es decir, ya pasaron por los cinco pasos de las Finanzas personales según Alejandro). Tienen además los bolsillos llenos (no garantizado por leer el blog). Ellos ven una propiedad y analizan las ventajas y desventajas. Pagan a crédito si las ganancias creadas por invertir ese dinero por otro lado son mayores que los intereses pagados. Si no es así, la compran de contado.

Negocios

En cuanto a negocios, mi recomendación es empezar orgánicamente y con un capital pequeño. Si el negocio empieza a ser rentable y el pequeño capital disponible se vuelve una limitación al crecimiento, entonces es recomendable solicitar un crédito. Antes de esto se debe hacer un análisis muy profundo para determinar si las ganancias superan los intereses pagados.

tarjeta debajo de recibos
No tiene caso estar ahogándonos en deudas. Así de simple.

Cómo pagarlas

Como ya se vio, no tengo mucha experiencia en el tema, afortunadamente. Menos en el pago de deudas múltiples y simultáneas. Aún así he investigado al respecto. Espero que las siguientes reglas simples sean de ayuda :

  1. Hacer por lo menos el pago mínimo de todas las deudas, inicialmente. Negociar si es necesario.
  2. Atacar primero las deudas menores (esto es pagando lo más posible por arriba del mínimo).
  3. Con el dinero que se vaya liberando, seguir pagando en orden ascendente.
  4. Al llegar a la deuda mayor, contaremos con todo el dinero que se liberó al saldar las menores y pagarla será más fácil.
  5. Disfrutar de una vida libre de deudas, con unas finanzas libres de grietas y durmiendo como bebé.

Otros recomiendan empezar con las que causan mayores intereses. La decisión se la dejo a los amables lectores.

Hay un artículo interesante que explica paso a paso cómo salir de deudas. Muchos pasos son complejos para alguien desidioso como yo. Por eso mejor mantengo mi vida simple, sin deudas y sin miedos.

Advertencia: alto contenido filosófico

La tranquilidad de unas finanzas personales libres de grietas es más importante que la aceleración del auto, el número de cuartos de la casa o las pulgadas de la pantalla LED curvada. Si deseamos todas esas cosas, podemos ahorrar y comprarlas. Pero quiero pensar que algunas veces nos hacemos de cosas por alimentar el ego o simplemente por compararnos con otros. En ese momento hay que parar y analizar si de verdad eso es lo que buscamos.

Otra opción es vivir de manera frugal, que no es lo mismo que miserable. Dar importancia a cosas que no son materiales. De esta manera podremos disfrutar de otros aspectos de la vida y dar valor a las cosas simples que causan alegría. Por supuesto nadie es perfecto ni lo quiere ser. Algunas veces nos damos lujos y disfrutamos de esas cosas que soñamos al ver los aparadores. Y por supuesto, como leemos el Blog de Alejandro, lo hacemos sin deudas ni remordimientos.

Conclusión

puerta coche
Antes de abrirlo: ¿vale la pena endeudarse por él?

Mi opinión es que vivir libre de deudas es lo mejor que podemos hacer. Por supuesto en situaciones de extrema pobreza o si la supervivencia está de por medio no hay gran opción. Por otro lado, puede ser justificable adquirir deudas para la casa o un negocio exitoso.

En cualquier caso, la deuda es el enemigo público número uno. Hay que atacarla mes con mes y no descansar hasta tener al enemigo rendido a nuestros pies mientras celebramos nuestra victoria con la cabeza a lo alto.

Una vez que tengamos las finanzas personales libres de grietas, es posible pasar al siguiente paso en las finanzas personales: crear un fondo de emergencia.

El bebé que llevaba a su mamá de la mano para dormir profundamente toda la noche creció. Se enteró de que la vida es más complicada de lo que parecía entonces. Contrajo algunas deudas y las pagó. Lleva ya nueve años con sus finanzas personales libres de grietas.

Me está dando sueño. Es hora de dormir. 8 o 9 horas, sin problema. ¡Buenas noches!

 

 

 

10 respuestas a “
Finanzas personales libres de grietas

  1. Comparto la filosofía: la tarjeta de crédito debe pagarse sola. Sin embargo, he estado pensando sobre una recomendación que escuché hace meses en la radio: gasta más que tus ingresos, para que te veas obligado a buscar mecánicas para aumentarlos. De momento pensé que era lo más descuidado, peligroso e irresponsable que había escuchado respecto a finanzas personales; sin embargo, en el medio del paracaidismo -que esta lejos de ser un deporte barato- he conocido personas que, con tal de poder saltar más seguido, o de viajar para participar en eventos internacionales organizados en otros países, han hecho los ajustes para adaptarse a estas presiones. Algo me queda claro: sin disciplina ni buena administración viajas a la quiebra.

    1. En lo personal, no me parce correcto ese consejo.
      Si gastas más de lo que tienes, vas a estar pagando intereses constantemente.
      Si gastas menos de lo que tienes vas a poder invertir y recibir un ingreso pasivo, proveniente de los intereses que tú estás recibiendo. (Esto es material de un futuro artículo de la serie.)
      Con este ingreso pasivo vas a poder comprar más cosas si así lo deseas.

    2. Yo creo que hay casos en los que se vale ponerse un poco al límite, como dices, Gustavo. Como en el caso de los paracaidistas. Si no se pone en riesgo algo serio, como la educación de los hijos, por ejemplo, y si se hace de manera calculada, ¿por qué no?

  2. Te felicito. Muy acertados tus comentarios. Creo que sí es muy sano no tener deudas innecesarias. Tenemos tarjeta de crédito pero jamás pagamos el mínimo. Siempre el total y antes de usarla analizamos si los gastos están dentro de las posibilidades de pagar todo a fin de mes. Así podemos dormir tranquilos.

  3. Yo también soy “totalero”, cada mes pago el total de las tarjetas. Los consejos que das son la biblia de las finan zas personales. No creo que gastar más de lo que se gana sea útil, al contrario, puede llevar a situaciones difíciles de controlar.
    Felicitaciones, muy buen artículo.

  4. Tienes mucha razon, en decir del cuidado para utilizar las tarjetas de credito, al menos que se pague la totalidad . y tambien es una manera de no gastar mas de lo que ganamos y asi llevar un control de nuestros gastos. Felicidades

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