Finanzas personales según Alejandro

El tema de las finanzas se me hace muy interesante. Será un tema que trataré en varias ocasiones, ya que considero que las finanzas personales o familiares son un tema importantísimo. Tan importante que debería de ser una materia obligatoria en las escuelas. Sin embargo nos independizamos, salimos a enfrentar al mundo y creamos familias sin tener las bases para unas finanzas adecuadas.

Yo, como era de esperarse, cometí muchos errores en ese rubro. Un buen día decidí ponerme a investigar sobre el tema y después de mucho leer y experimentar, he llegado a algunas conclusiones interesantes. Mi intención aquí es compartirlas, pues estoy convencido de  que con un poco de dedicación podemos darle más tranquilidad a nuestras vidas.

Este artículo es solo una introducción. En futuros artículos pienso elaborar más en cada uno de los temas que trato a continuación:

Bases para las finanzas sanas

El tema del dinero siempre será controversial. Cada uno de nosotros tiene ideas diferentes de cómo usarlo y cómo no usarlo. Mi intención aquí es detallar, de forma cronológica, los pasos que considero importantes y que creo que abarcan a la mayoría de la población.

Si me hicieras la siguiente pregunta hipotética:

Alejandro: dime, en unos cuántos pasos cómo puedo dormir tranquilo todas las noches sin miedo y sabiendo que puedo enfrentar las dificultades que la vida me pondrá enfrente preocupándome por la dificultad en sí y no por la falta de dinero para atacarla.

En primer lugar me sentiría halagado por ser el receptor de tan trascendente pregunta, pero mi respuesta sería muy simple:

Empezando hoy mismo, y en el orden que te lo digo, sigue los siguientes pasos:

  1. Vive por debajo de tus recursos y de tu ingreso.
  2. Elimina completamente tus deudas.
  3. Crea un fondo que te dé un colchón de seguridad en caso de eventualidades.
  4. Ahorra un porcentaje de tus ingresos.
  5. Invierte tu dinero a largo plazo, siéntate y cruza los brazos y mira tus ahorros crecer.

Es todo. Suena fácil, y es fácil de verdad. A continuación me extenderé en cada unos de los puntos anteriores.

Vivir por debajo de los recursos

Las matemáticas son crueles y directas: simplemente no podemos gastar más de lo que tenemos. Así de simple, sin pretextos.

Suena muy obvio, pero si hacemos un examen de conciencia nos acordaremos de ocasiones en las que hemos deseado algo que está por encima de nuestras posibilidades. Lo compramos haciéndonos de deudas, que a su vez nos meten en situaciones en las que no queremos estar. Si hay un imprevisto, estamos en problemas.

Conclusión: nos guste o no nos guste, vamos a vivir de acuerdo a nuestras posibilidades. Ya veremos después cómo podemos aumentar nuestros ingresos.

Eliminar por completo las deudas

Atacaremos el problema empezando por las deudas más innecesarias:

Tarjetas de crédito

Las tarjetas de crédito las tenemos que pagar al 100% cada mes. Los intereses son estratosféricos y el único que se va a hacer rico con nuestras deudas es el banco. Los gastos de la tarjeta se deben presupuestar para que al final de mes o al mes siguiente (dependiendo de la fecha límite de pago),  el estado de cuenta sea de cero.

El auto

Si estamos pagando un coche a plazos, debemos eliminar esta deuda tan pronto como podamos. Dejemos que la realidad nos deje, impasiva, su mensaje: el coche perdió el 30 % de su valor en el momento que cruzó la puerta de la agencia. No tiene ningún caso que sigamos pagando, mes con mes, no sé cuántas veces su valor.

Pensemos en el primer punto: vivamos por debajo de nuestros recursos y compremos, de preferencia de contado, el auto que está dentro de nuestras posibilidades. Si de todas maneras decidimos comprar el coche a crédito, pagaremos ese crédito tan pronto como sea posible.

Bienes raíces

La casa, depa, propiedad, casa de vacaciones, etc: en este caso un crédito puede ser necesario, únicamente para el lugar en el que vamos a vivir. De cualquier manera, hay mucho que podemos hacer para facilitarnos las cosas:

  • Pagar lo más que se pueda de enganche
  • Buscar un crédito que no penalice el adelanto de pagos para así atacar la deuda desde el principio.
  • Pagar mes con mes una cantidad mayor a la mensualidad establecida. Aunque sea un poco, cualquier cantidad es buena. Debemos asegurarnos de obtener un crédito en el que el pago extra vaya directamente a la deuda principal y no a los intereses.
  • Ponernos como meta atacar la deuda de frente, con todos nuestros recursos, y acabar con ella varios años antes de lo estipulado
  • Si ya tenemos una deuda y las condiciones no son óptimas, podemos considerar re-negociar el crédito con el banco para mejorar las condiciones.

Acabar con ellas, ya

La verdad es que no hay nada como vivir sin deudas. Nos mejora el sueño y nos permite ver la vida desde otra perspectiva, sin miedo.

Cero deuda es el estado ideal, aunque…

Excepciones a lo anterior

  • Un crédito del lugar en el que vivimos, como mencioné anteriormente.
  • Si tenemos inversiones que nos dan más intereses que nuestras deudas, es mejor no deshacernos de esa inversión y pagar nuestras cómodas mensualidades tal como está estipulado.
  • Obtener un crédito para crear o hacer crecer un negocio. Si estimamos con muy buenas bases que los ingresos del negocio son mayores a los pagos del crédito, adelante.
  • Una emergencia de verdad. Algo grave que requiere nuestra intervención inmediata. No se incluye que el vecino se compró un coche mejor que el mío.

Crear un fondo de seguridad para las eventualidades

Nuestros gastos son menores a nuestros ingresos; estamos libres de las deudas que nos comían vivos. Podemos pasar al siguiente nivel.

Vamos a crear, con los sobrantes (el vivir por debajo de nuestros ingresos y el dinero que teníamos destinado a los créditos en el pasado), un fondo de emergencia. Lo haremos de la siguiente manera:

Abriremos una cuenta de ahorros de difícil acceso. No la tocaremos a menos que estemos en una emergencia, como pérdida de trabajo o enfermedad.

Esta cuenta será, de preferencia, una inversión que nos de algo interés, pero que esté a nuestro alcance en caso de eventualidades. La cantidad será suficiente para sobrevivir mientras conseguimos el siguiente trabajo en caso de desempleo (de 6 a 9 meses me parece razonable). También nos cubrirá la posibilidad de hacer un gasto grande de hospitalización, o tratamiento médico mayor.

Este fondo debe vivir en una cuenta separada de nuestra cuenta corriente normal. Debemos ponerla detrás de un vidrio con la siguiente advertencia:

“Precaución: rompa solo en caso de emergencia”

foto fondo de emergencia
Fondo de emergencia – paz y tranquilidad para las eventualidades

Ahorrar

Hemos hecho la tarea y los pasos 1, 2 y 3 están completos. Por fin es hora de ahorrar. A menos de que vivamos en la pobreza, sí es posible. Por mucho que pensemos que no nos alcanza el sueldo sí que podemos ahorrar.

Trataré de demostrarlo con la siguiente pregunta:

Si nuestro jefe, patrón, socio, o quien sea que nos paga el dinero del que vivimos nos informa que a partir del mes que viene nos va a bajar el sueldo 10 % ¿nos iremos a la quiebra y viviremos en la miseria, o simplemente nos adaptaremos a las nuevas condiciones?

Creo que la respuesta es la segunda y si no, entonces debemos ponernos a buscar un nuevo trabajo ¡Ya!

¿Cuál es la solución, entonces?

Lo que debemos hacer es auto-bajarnos el sueldo el 10 %. Cuando nos llegue nuestro cheque o transferencia, hacemos a un lado lo que nos acabamos de descontar. Lo pondremos en una cuenta que esté fuera de nuestro alcance y durante el resto del mes nos arreglamos con lo que quedó. Sí se puede. Nos vamos a tener que adaptar, pero sí se puede. Y el 10 % es para empezar. La idea es que ese porcentaje vaya aumentando conforme vayamos ascendiendo rangos en nuestro trabajo.

Aparte de ese 10 % es buena idea ahorrar bonos y otros pagos adicionales que recibamos. Y si nos acaban de dar un aumento de sueldo nosotros no nos lo daremos. En el siguiente aumento nos daremos el aumento anterior y así sucesivamente.

Lo  importante de este punto es que debemos apartar el ahorro el primer día del mes y no tocarlo más.

El ahorro es nada más una parte de la ecuación. De qué nos sirve tener dinero debajo del colchón cuando está perdiendo valor día con día gracias a nuestra amiga la inflación. Esto nos lleva al siguiente punto.

Invertir lo que se ha ahorrado

El dinero que tenemos ahorrado pierde su valor constantemente.  De eso no hay duda, y eso es malo para nosotros. ¿Después de tantos sacrificios y privaciones queremos a ver nuestro dinero hacerse chiquito con el paso de los años? la respuesta es, obviamente, ¡No!

La buena noticia es que el dinero puede trabajar para nosotros. El dinero bien invertido trabaja para nosotros mientras dormimos, mientras trabajamos y mientras disfrutamos nuestras vacaciones.

Lo que invertimos crece, ese crecimiento se reinvierte, y esa reinversión a su vez crece, creando el milagro que explico a continuación.

La magia del interés compuesto

Si el dinero que ahorramos lo invertimos, y los intereses obtenidos los agregamos al principal y los reinvertimos, estaremos creando una bola de nieve. Y para los lectores jóvenes que tienen mucho tiempo enfrente de ellos, la bola de nieve será de verdad gigante.

Un ejemplo: mil dólares ahorrados cada mes, invertidos con un interés del 3% (como seremos inversionistas inteligentes lo haremos mejor que eso). Si ese mismo interés lo reinvertimos a su vez, en 30 años tendremos $580,000, de los cuales $360,000 fueron de nuestros ahorros y $220,000 se crearon sin que nosotros hiciéramos nada.

Subamos la tasa de interés al 7 % que debería ser nuestro objetivo como los inversionistas inteligentes que seremos, y los números son más interesantes: $1,176,000, con los mismos $360,000 de nuestros ahorros y los otros $816,000 creados simplemente porque pusimos nuestro dinero a trabajar por nosotros, mientras nosotros trabajábamos, íbamos al baño, dormíamos, teníamos hijos, nietos, viajábamos y vivíamos nuestra vida.

Mil dólares son solo un ejemplo. Para la mayoría de nosotros no es posible ahorrar tal cantidad. Los números son válidos de cualquier manera. Por ejemplo, si ahorro cien dólares al mes, en 30 años acabaríamos con $117,600. Las matemáticas son crueles y directas, pero a estas alturas, a nuestro favor.

En lo personal me gusta mucho jugar con el interés compuesto. Hay muchas calculadoras en Internet, como ésta, para crear nuestros propios castillos en el aire.

También entiendo que muchos de nosotros ya no nos podemos dar el lujo de ahorrar durante 30 años. Estemos donde estemos en la vida, nunca es tarde.

Tipos de inversión

Los siguientes puntos se me ocurren relevantes como formas de inversión:

  • Bienes raíces. Comprar barato y vender cuando la propiedad recupere su valor, o comprar alguna propiedad como inversión para recibir una renta
  • Bonos de deuda de corporaciones o gobierno: normalmente inversiones estables y predecibles.
  • Acciones de la bolsa de valores, de preferencia basadas en índices. Aquí hablo de invertir y no de especular. Un portafolio de acciones conservador, amplio y a largo plazo reduce el riesgo. El crecimiento del capital y el pago de dividendos nos proporcionan un crecimiento muy aceptable de nuestra inversión. Este tema es un artículo completo en sí mismo.

Organización de las finanzas personales

Creo firmemente que invirtiendo un poco de tiempo cada mes en planear nuestras finanzas, podremos lograr grandes beneficios. Lo ideal sería tomar nota y controlar cada gasto que hagamos. Con dedicación es posible, aunque tal vez nos tome un poco de tiempo.

Inicialmente propongo la estrategia de ahorrar a principio del mes o de la quincena y dejar ese ahorro fuera de nuestro alcance. La inversión de tiempo es de un par de horas al mes.

Con lo que nos queda tendremos que buscar maneras creativas de gastar el dinero que nos queda. Esa creatividad nos hará más conscientes de nuestros gastos y automáticamente más organizados.

Frugalidad

Todo lo anterior será más fácil si vivimos una vida más frugal, si nos hacemos conscientes de los gastos que tenemos, y aceptamos la responsabilidad de hacer unos cuantos sacrificios pensando en el futuro.

Una vida frugal no tiene nada que ver con volvernos miserables. Podemos disfrutar la vida, los amigos, la buena comida, el buen vino y de manera paralela ser más cuidadosos con nuestros gastos y nuestros ingresos, y regalarnos un poco de paz y tranquilidad para el futuro.

cartera llena de recibos... ¿problemas con mis finanzas personales?
¡Ooops! Muchos recibos y nada de dinero… ¿será que no estoy siguiendo mis propios consejos?

Conclusión

Espero haber transmitido el mensaje que he querido transmitir en este extenso artículo. No importa dónde estemos, cuánto ganemos, cuáles sean nuestros gastos y nuestras necesidades, haciendo un pequeño sacrificio, nos haremos un favor que tendrá repercusiones positivas para el resto de nuestra vida.

Mi opinión es que todo ese dinero del que hablo no será para tener una vida material, sino para tener la seguridad de que podremos vivir una vida plena, hacer lo que nos de la gana, trabajar para quien nos de la gana mientras nuestro dinero trabaja para nosotros y mientras hacemos las actividades que nos llenan, y disfrutamos felizmente de nuestra muy merecida independencia financiera.

27 respuestas a “
Finanzas personales según Alejandro

  1. Para mí es muy difícil ser organizado y para esto se necesita mucha pero mucha disciplina, creo que es lo primero que debí de trabajar y luego te platico lo demás muy buen análisis

  2. Te agradezco tomarte el tiempo para dar estos consejos. Consideraré cada uno de ellos, sólo tengo duda sobre ¿cuánto debo contemplar para mí Afore?

    1. Hola Ingrid. Gracias por tu comentario. Puedes empezar por igualar la aportación mínima de ley y después de ver los resultados decidir si quieres aportar más. Te recomiendo comparar entre diferentes afores para que te quedes con la que más te conviene, poniendo especial atención en las comisiones que cobran.

      1. El problema es que, a veces, uno no elige a la Afore, sino que la Afore lo elige a uno. De pronto un día descubres que tus muchos o pocos ahorros ya no están en la que tú habías elegido sino en otra que, después, te pone mil trabas burocráticas para cambiar. Al menos eso me pasó a mí.

  3. Excelente artículo…..En lo personal he sido muy organizada con mis finanzas, pero encontré buenos tips…. Gracias y ojalá mucha gente que vive pensando que no hay como traer un super carro entendiera que ello NO SIRVE DE NADA y hay más cosas a las que se les debe poner interés. Saludos Alex.

  4. Alejandro:

    Excelentes consejos para vivir tranquilos, expresados de forma excelente : conceptos muy concisos y no difíciles de llevar a cabo. Felicitaciones.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *